Nacimos con el deseo de ofrecer comida casera de calidad, en un entorno cercano, cómodo y con alma. Nos dedicamos a la hostelería con pasión, desde el primer café de la mañana hasta la última tapa de la noche.
Nuestro equipo está formado por personas que aman lo que hacen. Desde cocina hasta sala, todos compartimos el mismo objetivo: que te sientas como en casa.
La Espuela no es solo un restaurante, es un punto de encuentro, un lugar donde compartir sabores, charlas y buenos momentos.
Cuidar de ti con cada plato que servimos. Queremos que comas bien, que disfrutes, que repitas. Aquí se viene a saborear, no a pasar el tiempo.
Ser tu primera opción cuando piensas en comida casera, cercana y deliciosa. Crecer sin perder la esencia: calidad, cercanía y autenticidad.
Todo comenzó con una idea clara: recuperar el sabor de antes y ofrecerlo con cercanía y autenticidad. Abrimos nuestras puertas con ilusión, sin grandes pretensiones, pero con una cocina honesta y un trato que marca la diferencia.
Con el tiempo, La Espuela se convirtió en mucho más que un restaurante: es parte de la vida del barrio y del día a día de quienes nos visitan.
Creemos que los detalles importan. Desde cómo cocinamos hasta cómo te saludamos al entrar. Usamos ingredientes frescos, apostamos por recetas caseras y respetamos los sabores que siempre han funcionado. Nuestra cocina es sencilla, pero hecha con alma.
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